Hola! Acá es! Vení, acomodate en el pasto conmigo. Dale, no pasa nada, es sólo el viento. Tengo algo que contarte...
19 de febrero de 2011
Ángel
Ángel mío,
no puedo dormir.
Por favor
ayudáme,
que no puedo más.
El silencio me aplasta,
Y lo peor es
no poder decir que
que
Todos están
tan lejos
de noche
-y de día también-
Por más que quieran,
¿quién puede
ayudar?
Si no hay
remedio;
están
tan perdidos
como yo.
Me estoy oxidando,
y dentro de poco
ya no habrá más
movimiento.
Quedaré
atrapada
gritando
y nadie
escucha.
Ángel,
desdobláme,
desgarráme
con uñas
y espada,
vaciáme
de este
Odio,
así aunque sea
en pedazos seré
libre.
Ángel mío,
¿dónde estás?
Ya no sé dónde
buscarte.
Y esa voz
-cómo detesto esa voz-
repitiendo que
no vas a venir.
Por favor,
ayudáme
a no pensar;
atáme las manos
por la espalda,
estoy tan cansada de hacerme
sangrar.
Ángel
Yo
te extraño tanto
volvé
Volvé,
que no puedo dormir.
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